Los bosnios

Los Balcanes, años 90… He aquí la estremecedora novela de una época terrible. He aquí un libro de relatos emocionante y lúcido sobre los muertos de aquella guerra: lápidas, casi, más que capítulos. He aquí, también, la autobiografía de su narrador, un joven escritor bosnio convertido en soldado en medio del Apocalipsis.

Los hombres y mujeres de cada bando, las palabras comunes (y las diferentes), las ciudades arrasadas… Y, escasos como diamantes, algunos pequeños gestos de bondad y ternura en medio de la barbarie. Son éstos, junto al bienvenido humor, los únicos momentos de «descanso» que tendrá el lector de esta obra maestra del dolor, de la vergüenza y de lo incomprensible, intensa y hermosamente desoladora como pocas.

«Ante una de las escasas casas musulmanas del barrio serbio de Modriča descubrieron, en una mezcladora de cemento, el cadáver machacado de una niñita de nueve años, desnuda. Desde el principio de la guerra no había electricidad en Modriča, por tanto debían de haber hecho girar la mezcladora a mano.»

«Durante uno de los bombardeos de Sarajevo, Huso, a quien la alerta sorprende en la calle, se apresura a refugiarse en la bodega del edificio en el que vive. En el patio, se encuentra a su vecino Haso balanceándose en un columpio para niños. —¡Eh, Haso! —dice Huso, sin aliento—. Todo Sarajevo a punto de palmarla, y tú no encuentras nada mejor que hacer que columpiarte. Salva el pellejo mientras estés a tiempo… —Si no me estoy columpiando —responde Haso—, ¿no ves que estoy fastidiando a un francotirador serbio?»

Leído en la prensa

«Las terribles historias relatadas en Los bosnios componen un imborrable grabado de la barbarie balcánica de principios de los noventa. El texto es un mosaico construido con breves y precisas pinceladas. Una galería de retratos de víctimas, verdugos, pequeños héroes anónimos, ciudades martirizadas y prisiones que a veces tienen el sabor de poéticos epitafios y que parece de alguna manera una suerte de Antología de Spoon River, la obra maestra del poeta estadounidense Edgar Lee Masters, brotada en los Balcanes Occidentales.» Andrea Rizzi, El País

«Velibor Čolić recoge en su pequeño e impresionante libro, alternando atroces crímenes de guerra con pasajes de una poesía sonámbula y espectral, gran cantidad de recuerdos y testimonios, en ocasiones fulminantes retratos, de lo que fue la guerra de Bosnia.» Mercedes Monmany, ABC 

«Compuesto de pequeñas estampas bélicas no más largas de una página, Los bosnios es lo que se dice un fresco de una guerra, la de los Balcanes, pero contada sin afectación y desprovista también de esa supuesta objetividad fría de la frase corta y distante. (...) Escribe con el aval de las notas que tomó en su momento y con rigurosa vocación documental, lo cual amplía la capacidad de estremecer de estas pequeñas historias.» Eduardo Laporte, El Correo

«Cada relato representa retratos afilados, crueles, inocentes, insensatos y delincuentes. Como un Emir Kusturica de las palabras, nos ayuda a comprender mediante flashes cómo aquel antiguo país común tiene un corazón único pese a la lucha sin cuartel. Analizar la contienda conllevaría 15.000 asuntos geopolíticos que no aborda, pero contextualiza de igual modo y resulta una patada en los genitales y un lugar hacia donde no querer mirar. Un espacio necesario.» Ángeles López, La Razón

«Cada breve historia, cada pildorazo, ejerce el poder de una bofetada escupida por algún diablo empeñado en hacer ver al incauto lector que sí, que el ser humano es capaz de semejante aberración. Todo lo que uno creía saber sobre la Guerra de los Balcanes queda ahora bañado por una luz nueva, dolorosa pero necesaria. (...) El conjunto es de una belleza extraña e indescriptible.» Pablo Bujalance, Diario de Sevilla

«Esas inolvidables ráfagas de metralla literaria, mezcladas con testimonios y pura poesía acerca de la Guerra de los Balcanes, son sin duda uno de los mejores libros de los últimos años.» Alfonso Vázquez, La Opinión de Málaga

«En sólo 120 páginas el autor es capaz de poner ante nosotros toda aquella miseria moral, la capacidad del ser humano para destrozarse a sí mismo y arrastrarse por el fango.» Ramón Rozas, Diario de Pontevedra

«Los bosnios es una plegaria en toda regla, sin paliativos, en memoria de las víctimas de la guerra.» Fermín Herrero, El Correo

«Las páginas de Los bosnios son un grito, donde en lugar de capítulos, rezan epitafios.» Ángeles López, La Razón

«Estremecedor, y al tiempo hermosísimo, libro de relatos sobre los hombres y mujeres que perdieron la vida en la guerra de los Balcanes, allá por la década de los 90. Un recorrido por una geografía manchada de sangre.» Álvaro Colomer, Yo Dona

«En estas páginas conviven los hombres y las mujeres de cada bando, sus palabras comunes y sus ciudades arrasadas, pero también, aunque escasos, pequeños gestos de bondad y ternura en medio de la barbarie, que funcionan en esta novela como momentos de descanso para el lector.» EuropaPress

«Los bosnios es sin duda alguna uno de los libros más impactantes que he leído en los últimos años. Los bosnios es una bomba, un AK-47, una granada de mano, un bazuca, una explosión de literatura visceral perpetrada por un desertor de las fuerzas bosnias.» Mario Crespo, Literaturas.info

 

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