La pelirroja

La Pelirroja, publicada por primera vez en 1878, cuenta la fascinante historia de una joven, hija de un enterrador, víctima de sus deseos de amor, prosperidad y pasiones. Es, sin duda, una de las novelas más singulares y atrevidas, por su contenido erótico y su crítica social, de la literatura portuguesa del XIX, y fue la primera obra maestra, inédita en español hasta hoy, de Fialho de Almeida, cuyos libros producían en Fernando Pessoa, según nos cuenta en el Libro del desasosiego, «un placer intangible».

Algunos críticos consideran a Fialho el Dickens portugués, otros el reverso de Eça de Queiroz, y todos el mejor retratista de la Lisboa popular. Desde niño, antes de estudiar Medicina, trabajó en una mísera botica, en la que pasó día y noche, durmiendo sobre una tabla. Allí conoció a muchos de los personajes recreados en estas páginas. La Pelirroja ha sido definida, al ser rescatada en Portugal recientemente por la prestigiosa editorial Assírio & Alvim, como parte de una «histología social» similar a la que desarrollaría más tarde en sus novelas el también médico y escritor Louis-Ferdinand Céline.

Leído en la prensa

«Será raro que el lector no mire con asombro la fecha de publicación de la novela, porque en estas páginas, todo lo decimonónicas que se quiera, hay una estimulante mezcla de furia y libertad de lenguaje, una necesidad de nombrar la realidad con total crudeza, que era desconocida en otras latitudes.» Miguel Sánchez-Ostiz, ABC

«Con una maestría insólita, le casan los altos vuelos con el fogonazo chabacano. En estas páginas no se elude la tensión erótica, la explotación y la esperanza que acarrea el sexo en una sociedad hipócrita y corrupta; la pintura de la degradación de los pobres y el contraste con el escaparate de los ricos nunca es demagógica, sólo irrebatible.» Miguel Bayón, El País